En Santa Fe, la Empresa Provincial de la Energía (EPE) acaba de pedir en audiencia pública un aumento de 25,7% promedio, en dos tramos.
Mientras la inflación de 2021 en Santa Fe promedió el 50,7%, el aumento de precios del rubro de vivienda y servicios básicos sólo lo hizo en un 32,2%.
Esta categoría que involucra, entre otras cosas, el impacto de las tarifas y los impuestos fue el que menos subió el año año pasado, como parte de la estrategia de utilizarlos como ancla inflacionaria. Es más, el subrubro servicios básicos y combustibles para la vivienda subió sólo 17,7% en el año.
Pero 2022 viene con renovada presión en este segmento. En Santa Fe, la Empresa Provincial de la Energía (EPE) acaba de pedir en audiencia pública un aumento de 25,7% promedio, en dos tramos, más la autorización de un ajuste semestral de acuerdo a la evolución de los costos. Aguas Santafesinas oficializó ayer una solicitud de incremento de 60% desdoblado. Y en Buenos Aires, Litoral Gas pidió un aumento en el margen de distribución que, de ser aprobado, se expresaría en una suba de 20% en la factura residencial desde marzo. En términos impositivos, el inmobiliario aumentó un promedio del 30%, luego de la aprobación de la ley tributaria en la Legislatura provincial. La TGI municipal ya subió.
Pero también hubo aumentos en las tarifas de taxis y en los impuestos vinculados al transporte automotor, como las patentes. Tras un año de cierta contención, los servicios regulados vuelven por sus fueros en la puja distributiva.
Fuente: la capital