El aumento de los precios de la carne vacuna generó, indirectamente, un incremento de la demanda del pollo y, por ende, un aumento en los precios de este producto.
El aceite se pagó a $413,15 durante mayo en el canal minorista, para venta al público, mientras que el mayorista lo vendió al comercio a $261,30. La diferencia entre una y otra punta fue del 58,1%. El precio de un paquete de fideos secos espagueti en el eslabón de la industria fue de $42,95 mientras que en el mayorista ascendió a $62,13 y el canal minorista se ubicó en $83,06. El kilo de harina de trigo 0000 tuvo un valor de $92,70, $123,36 y $142,76, respectivamente, en cada uno de los eslabones. Un kilo de papa negra el mayorista lo vendió a $30,68 y al público salió $76,66; mientras que un kilo de tomate se pagó $89,38 en el canal mayorista y en el comercio a $208,63 o un kilo de banana a $122,50 y a $215,71, respectivamente.
Estos son algunos de los primeros datos relevados por el Observatorio de Precios de la provincia, un espacio creado recientemente para desarrollar un sistema de información de precios de productos elaborados en Santa Fe, tanto en niveles industriales, mayoristas y de comercio minorista para conocimiento público y disponibilidad de organismos para la toma de decisiones públicas.
Durante un acto en Santa Fe Capital, en el que se rubricaron convenios de adhesión a la iniciativa provincial con cámaras empresariales, se presentó el primer estudio del Observatorio, información con la que se busca generar mecanismos de información y anticipación para adelantar situaciones estacionales de abastecimiento o precios en artículos producidos y comercializados en la provincia.
Entre los datos presentados se destaca que la variación interanual abril 2021-2022 arrojó una suba en leche del 58%, manteca 73%, papa 26%,tomate redondo 113% y banana 45%. En cambio, se destacaron las naranjas que bajaron 25%.
Juan Marcos Aviano, secretario de Comercio Interior de Santa Fe, recordó que el Observatorio de Precios de la provincia es una iniciativa del ministerio de la Producción, Ciencia y Tecnología de Santa Fe “para interactuar en los distintos eslabones de la cadena y poder contar con un sistema de información que se vaya acrecentando y que cada mes se vaya dotando de nuevos precios y fuentes de información”. Si bien el funcionario aclaró que no tiene una finalidad estadística sino una finalidad informativa destacó que se trata de una herramienta “para ver en cada eslabón de la cadena los movimientos de precios, las distorsiones o intervenciones positivas que se deben llevar adelante para que la cadena de precios de alimentos y de productos de primera necesidad sean lo más transparente posible”.
Respecto a este último punto, Aviano precisó que podrían tratarse de medidas fiscales, tributarias, crediticias, compensaciones o subsidios.