Flavia Royón, Secretaria de Energía, confirmó la postergación de la segmentación tarifaria para luz y gas y dio detalles de su implementación. “Estamos trabajando contra reloj. No es un tema sencillo lo de la segmentación. Tenemos expectativas de que la semana que viene sea oficial. Queremos que el subsidio llegue a quien realmente lo necesita”, dijo la funcionaria.
A su vez, precisó que “aquellos que no se anotaron sufrirán aumentos en tres tramos. El primero será el más fuerte. Queremos pasar la agenda para hablar de eficiencia. El incremento dependerá del consumo de cada familia”.
“El costo de la energía es diez veces más caro por la guerra entre Rusia y Ucrania. Es una realidad distinta. No serán aumentos como los que se ven en Europa. No va a afectar a la tarifa social y a los que menos tienen”, agregó Royón en declaraciones radiales. La Secretaría de Energía precisó que el esquema tarifario incluirá especificaciones acerca de la segmentación y el tope de consumo por zona y sector, teniendo en cuenta diversos factores, como el climático.
Con relación a los topes de consumo, los nuevos valores mantendrán la tarifa vigente para usuarios nivel 2 (de menores ingresos) y 3 (de ingresos medios), pero en este último caso el consumo que exceda los 400 kilowatts no será subsidiado.
La relevancia de la segmentación radica en su impacto en las cuentas públicas. Los subsidios energéticos aumentaron un 116% el primer semestre del año comparado con el mismo período de 2021, que significaron unos $ 411.815 millones extras, según el informe de tendencias energéticas del Instituto Argentino de la Energía.
A su vez, la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) informó que las transferencias a la energía acumulada a junio de 2022 fueron de $ 764.483 millones.
El ex secretario de Energía Jorge Lapeña le dijo a PERFIL que “la tendencia es preocupante porque a precio dólar oficial ya se utilizaron en subsidios energéticos 6.500 millones de dólares”. El especialista también indicó que, debido a las compras de gas licuado entre julio y agosto, los recursos comprometidos para todo el año “pueden llegar a ser de 15 mil millones de dólares”.
Por otro lado, el sector energético mostró una balanza comercial deficitaria del mes de junio en 1.226 millones. Las exportaciones aumentaron 105% mientras que las importaciones fueron de 189%.
Respecto a este punto, el ministro de Economía, Sergio Massa, justificó el miércoles la sangría de las reservas del Banco Central al sostener que “entre dejar salir un poco más de reservas o cortar el gas y la luz” el Gobierno priorizó “soltar un poquito de reservas, pero garantizar a los argentinos que pudieran tener calefacción, la computadora o las máquinas de las empresas funcionando”. Además, consideró que si Vaca Muerta estuviese funcionando, Argentina se habría ahorrado “la gran mayoría de los US$ 4.100 millones que se destinaron a la importación de energía durante este año”.
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