El Ministerio de Economía “consumió” en los dos primeros meses del año prácticamente todo el déficit que tiene autorizado por las metas fiscales acordadas con el Fondo Monetario Internacional.
En febrero, el déficit fiscal se triplicó en relación a enero y alcanzó los 228.000 millones de pesos.
Con esos datos, el Ministerio de Economía “consumió” en los dos primeros meses del año prácticamente todo el déficit que tiene autorizado por las metas fiscales acordadas con el Fondo Monetario Internacional.
En lo que va del año, la recaudación cayó en términos reales un 5,6%, algo esperable en base a la retracción económica y al impacto de la sequía, pero al mismo tiempo el gasto creció un 1,7%. Los números fiscales empujan a creer que la readecuación de las metas con el FMI es un hecho, ya que el Gobierno quedó al borde del incumplimiento.
En este sentido, también se espera que el Directorio del Fondo acepte un cambio en otra meta, la de acumulación de reservas en el Banco Central. De hecho, esta semana el BCRA acordó con el FMI la postergación de un pago por 2.700 millones para hacerlo coincidir con un desembolso del organismo de 5.400 millones de dólares previsto para fin de mes.
De esta forma, las metas dispuestas por el Fondo se vuelven cada vez más flexibles y laxas y dejan a la economía sin la única hoja de ruta conocida.
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