Después de cuatro meses de repunte, las instalaciones fabriles del país volvieron a ceder parte de sus posibilidades a la inactividad. La molienda de oleaginosas fue la única excepción significativa.
La utilización de la capacidad instalada en la industria, según informó el Indec, se ubicó en 62,3% en noviembre, nivel inferior al del mismo mes de 2023, que fue de 66,4%.
El dato refleja que el éxito macroeconómico de la administración Milei tiene su contracara en la producción interna, en especial de sectores fabriles que han perdido toda política sectorial y afrontan un mercado interno que no termina de recuperar sus niveles del “plan platita”.
Análisis por sectores
Los bloques sectoriales que presentan niveles de utilización de la capacidad superiores al nivel general son refinación del petróleo (82,1%), papel y cartón (68,6%), industrias metálicas básicas (67,2%), productos alimenticios y bebidas (66,9%), sustancias y productos químicos (66,1%), e industria automotriz (64,7%).
Pero incluso éstos tienen margen para evolucionar sin necesidad de grandes inversiones, que por otra parte llegan en el marco del RIGI e impactará recién en los indicadores de este año pero sin “derramar” en bienestar general.
Por su parte los bloques sectoriales que se ubican debajo del nivel general -siempre según el Indec- son productos minerales no metálicos (60,6%), edición e impresión (53,0%), metalmecánica excepto automotores (50,0%), productos textiles (48,2%), productos del tabaco (47,6%), y productos de caucho y plástico (46,8%).
“En noviembre de 2024, respecto al mismo mes de 2023, la principal incidencia negativa se registra en las industrias metálicas básicas, que presentan en el mes bajo análisis un nivel de utilización de la capacidad instalada de 67,2%, inferior al registrado el mismo mes del año anterior (79,4%)”, apuntó el Indec.
“En este sentido, según datos de la Cámara Argentina del Acero, en noviembre la producción de acero crudo presenta una caída interanual de 18,1%”, agregó el organismo.
Los productos de caucho y plástico presentan en noviembre un nivel de utilización de capacidad instalada de 46,8%, inferior al registrado en el mismo mes de 2023 (56,8%), como consecuencia de los menores niveles de fabricación de manufacturas de plástico y de neumáticos, sector éste último afectado por altos costos internos y una política de apertura comercial relativa desde el gobierno central.
Impacto en la construcción
Los productos minerales no metálicos -rubro en el que impacta la baja de obras públicas- registran en noviembre un nivel de utilización de la capacidad instalada de 60,6%, inferior al del mismo mes de 2023 (74,3%), “como consecuencia de la menor fabricación de cemento, vidrio y otros materiales de la construcción”.
“Según datos del IPI manufacturero, la producción de vidrio y productos de vidrio y la elaboración de cemento presentan caídas interanuales de 20,4% y 15,6%, respectivamente, en el mes bajo análisis”, agrega el organismo al respecto de los productos minerales no metálicos.
Asimismo, según el Indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC), “la actividad de la construcción presenta una disminución interanual de 23,6% en el mes bajo análisis”.
“Por su parte la industria automotriz muestra un nivel de utilización de la capacidad instalada de 64,7%, inferior al de noviembre de 2023 (68,3%), relacionado a la menor cantidad de unidades fabricadas por las terminales automotrices”.
Fuente: el litoral