La economía provincial se desplomó 7 por ciento en marzo, en relación al mismo mes del año anterior. Así surge de la medición que realiza todos los meses la Bolsa de Comercio de Santa Fe. La actividad acumula una baja de 0,3 por ciento en lo que va de 2019. El Indice Compuesto de Actividad Económica de la provincia de Santa Fe (Icasfe) se utiliza para conocer la evolución del nivel de actividad.
Según el índice, la actividad económica santafesina se contrajo 0,2 por ciento en marzo en relación al mes anterior. Los tres primeros meses del año la baja fue de 0,3 por ciento respecto del trimestre anterior. De hecho, es el quinto trimestre consecutivo de caída desde el inicio de la recesión.
De los indicadores que componen el Icasfe sólo cinco presentaron variaciones acumuladas positivas para el primer trimestre del año (en marzo todas sufrieron caídas). Se trata de la venta de maquinaria agrícola (10,9 por ciento), consumo de cemento (8,2 por ciento), hidrocarburos agroindustriales y de transporte (3,6 por ciento), energía eléctrica industrial (0,7 por ciento) y recursos tributarios (0 por ciento).
Entre los rubros en retroceso figuran las ventas en supermercados (-0,1 por ciento), puestos de trabajo (-0,3 por ciento), demanda laboral (-0,6 por ciento), gas industrial (-1,1 por ciento), molienda de oleaginosas (-2,6 por ciento), remuneraciones reales (-2,9 por ciento), faena de ganado bovino y porcino (-4 por ciento) y patentamientos nuevos (-10,9 por ciento).
La variación interanual del Icasfe permaneció negativa en torno del 7 por ciento durante el primer trimestre del año.
Para los especialistas de la Bolsa de Santa Fe, “todavía quedan dos cuestiones importantes a visualizar antes de definir si la economía se encuentra o no en la base de la recesión”.
La primera es que “hay sectores que continúan cayendo desde el inicio de la recesión”. La segunda es que, de los sectores que crecieron, ninguno recupera la caída registrada durante 2018.
Fuente: lacapital.com