El ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, brindó ayer martes una conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda para referirse al resultado fiscal y la deuda pública.
El funcionario dijo que en el noveno mes del año hubo un déficit previo al pago de deuda de $25.368 millones, en buena medida por las medidas de incentivo para la economía, dispuestas después del resultado adverso para el oficialismo en las elecciones primarias, lo que impactó en los ingresos percibidos por el fisco en concepto de aportes patronales.
No obstante, Lacunza ponderó ingresos totales crecen por encima de los gastos primarios, mientras que en el acumulado entre enero y septiembre de este año se sostuvo un superávit de 23.000 millones de pesos.Lacunza proyectó una inflación de 54% y una caída del PBI de 2,4% en 2019
Al contabilizar el pago de servicios de deuda pública, es decir el resultado financiero, se registró en septiembre un déficit de $76.224 millones, con un incremento interanual de 36,5%, frente a una inflación estimada de 54% acumulado en los últimos doce meses.
Lacunza habló con los periodistas antes de emprender su viaje a Washington para participar de la reunión anual del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. En los Estados Unidos el funcionario tiene previsto reunirse con autoridades del FMI.
En la conferencia, el funcionario subrayó que septiembre fue el 27° mes consecutivo en el que los ingresos totales suben por encima de los gastos primarios.
Lacunza, reconoció que las estimaciones de la economía por parte del FMI son un “poco más negativas” que las esperadas por el Gobierno, mientras rechazó la posibilidad de que esta semana se dé una definición sobre el desembolso pendiente.
Sin embargo, aclaró que “no hay diferencias sustantivas” entre el análisis del Gobierno y el del organismo multilateral.El 90% de los desembolsos se usaron para pagar deuda, mayormente con acreedores privados
“Creemos que una vez resuelta la incertidumbre política y financiera por el perfil de la deuda, se estaría en condiciones de retomar el crecimiento antes de mediados del año próximo”, confió.
“Si se recupera el crecimiento, antes va a percibirse un alivio y recuperación en la actividad y consumo”, consideró.
Al referirse al viaje de esta semana a los Estados Unidos,afirmó que se trata de la reunión anual del FMI y remarcó: “Es nuestra obligación allanar el camino para que quien gane las elecciones pueda discutir la continuidad del programa”. Y añadió que “se realizará una reunión de seguimiento”.
Qué pasa con la deuda
Lacunza también hizo una referencia a la evolución de la deuda pública e indicó que “desde las elecciones primarias hasta acá, la deuda ha bajado, con una interrupción del crédito”.
Añadió que en ese contexto, “tiene lógica usar reservas, usar activos del Estado para cancelar pasivos”.
Desde que se tomó deuda con el FMI ingresaron USD 45.000 millones que se utilizaron para reducir la deuda con el sector privado e intra-sector público.
Explicó que a partir de 2018, con el stand by en marcha, “la deuda neta (con privados y organismos multilaterales) cayó unos USD 10.000 millones, por lo tanto con el acuerdo con el FMI no hay un financiamiento de una fuga de capitales. No hay correlación”.Desde las elecciones primarias hasta acá, la deuda ha bajado, con una interrupción del crédito
Lacunza puntualizó que “la variación de la deuda es la suma de la variación de los déficit de ese período” y que, por lo tanto, “las variaciones de deuda próximas van a ser más moderadas y sustentables”.
Precisó que la deuda pública bruta sobre el Producto Bruto Interno, si se considera el promedio de tipo de cambio de los últimos cuatro cuatrimestres, alcanza en la actualidad el 68% del PBI. Y si se acota a los compromisos del sector público con el sector privado y organismos, se reduce a un 43% del PBI.
Fuente: infobae.com