El Poder Ejecutivo estableció metas “paralelas” a las centrales del acuerdo con el Fondo. La AFIP deberá bajar este año casi tres puntos el incumplimiento de IVA. La misión técnica “secreta” que pasó por Buenos Aires.
El Gobierno avanzó en las últimas semanas, de manera silenciosa, en una negociación paralela que lleva adelante con el Fondo Monetario Internacional para determinar dos cuestiones clave: medir cuál es el nivel de incumplimiento de los dos principales impuestos, IVA y Ganancias, y establecer metas para aumentar la recaudación de los dos tributos. Para este año, por ejemplo, el Gobierno deberá bajar casi tres puntos porcentuales la evasión de IVA.
Forma parte de una agenda que la AFIP y el FMI iniciaron desde que tomó forma el acuerdo Extended Fund Facility (EFF) que se puso en marcha formalmente en marzo del año pasado. El organismo suele tener cosas para decir en términos de impuestos, presión tributaria y efectividad en la recaudación y en este caso no fue la excepción. El fisco solicitó asistencia del Fondo Monetario para resolver el agujero por el cual se le “escapa” una parte relevante de potenciales ingresos tributarios.
Para eso, por fuera de los radares una misión de técnicos del organismo pasó por Buenos Aires para poner en común con la AFIP un método para poder medir cuál es la brecha de incumplimiento de Ganancias, un ejercicio que por las propias características del impuesto es difícil para la mayoría de las administraciones tributarias. En los despachos oficiales aseguran que no hay muchos países que tengan datos certeros sobre la evasión en un gravamen de esa naturaleza y que son pocos los casos en la región.
Con esa asistencia técnica desde Washington, los funcionarios de AFIP consiguieron poner en común una metodología, que fue presentada por el organismo tributario argentino como novedad ante agencias impositivas de otros países, para medir cuánto del impuesto a las Ganancias está pasando por fuera del alcance del fisco.
De todas formas, una aproximación preliminar: ese trabajo técnico pudo medir la evasión en el universo de grandes empresas que pagan Ganancias y que representan el 80% del ingreso fiscal por esa vía. Todavía resta un tramo final para recorrer para la tributación de pequeñas y medianas empresas y para individuos. El número de evasión definitivo de Ganancias, estiman en los despachos oficiales, se terminará de conocer con precisión más cerca de fin de año. Aunque hay una pista: estará por encima de la cifra del IVA.
Para ese tributo el número consolidado de brecha de incumplimiento que registró la AFIP en 2022 fue de 34,3% del total de base imponible de ese impuesto. Para este gravamen, el que tiene más peso dentro del conglomerado de impuestos que forman parte del sistema tributario argentino, los números están más claros. Eso permitió al fisco y al FMI establecer objetivos cuantificables -no son condicionales como las de reservas, déficit primario o emisión monetaria- sobre cuánto debería caer el nivel de evasión año por año.
De acuerdo a datos a los que accedió Infobae que forman parte del programa con el Fondo Monetario pero que no están explicitados en el staff report que publica el organismo de manera trimestral, desde ese 34,3% de brecha de incumplimiento en 2022 este año debería bajar a 31,5 por ciento. De esta manera, la AFIP buscará “empatar” el registro más bajo medido en la serie histórica que desarrolló el organismo que conduce Carlos Castagneto.
El programa con el Fondo Monetario incluye objetivos a largo plazo, que ya incumbirán a la próxima administración: la evasión de IVA debería bajar a 30,7% en 2024, a 30% en 2025 y a 29,9% en 2026. Para otros impuestos (Ganancias pero también otros incluidos en una cuenta general) la AFIP y el FMI también acordaron metas, pero en términos de aporte al PBI: debería ser de 0,32% en 2023 (desde 0,11% de 2022), a 0,37% del Producto al año siguiente y 0,42% en 2025.
El EFF con el Fondo Monetario incluyó, en el inicio del programa, un piso de recaudación nominal trimestral, pero ante un primer incumplimiento en la segunda revisión, en septiembre del año pasado, esa meta fue descartada. Según aseguran en los despachos oficiales, no habrá metas condicionales sobre presión tributaria.
Por otra vía, sigue la negociación de metas y desembolsos que lleva adelante el Ministerio de Economía con el FMI para definir un nuevo sendero de envíos de Derechos Especiales de Giro (DEG) desde Washington, en medio de la escasez de reservas. El ministro de Economía Sergio Massa insistió en las últimas horas que “todas las opciones están sobre la mesa”.
Fuente: infobae