Un estudio privado destacó que la gran mayoría pasó más tiempo pensando en cómo mejorar sus inversiones mientras que muchos que no habían incursionado en la materia se animaron a dar un primer paso.
A partir de las cuarentenas y confinamientos establecidos a escala mundial, mucha gente que nunca se había interesado por el mundo financiero comenzó a utilizar esa mayor cantidad de tiempo en casa para hurgar en un mundo que le era ajeno: acciones, bonos, criptomonedas y demás activos pasaron a la órbita de personas que no tenían estos conceptos en el radar. Y en Argentina el fenómeno tuvo su correlato particular, que implicó que quienes ya invertían refuercen su interés respecto de dónde colocan su dinero.
Este enfoque más medido también se traslada a las perspectivas de jubilación de los inversores, ya que el 58% de los jubilados de todo el mundo son ahora más conservadores en cuanto al gasto de sus ahorros para su retiro, mientras que el 67% de los que aún están en el mercado laboral quieren ahorrar más para ese momento.
El impacto de la pandemia en Argentina resulta más evidente: el 80% de los no jubilados querrían ahorrar más para su jubilación, por encima del porcentaje mundial.
El documento destaca que los inversores de todo el mundo son ahora más propensos a comprobar sus inversiones al menos una vez al mes (82%), en comparación con el 77% de los inversores en 2019.
En particular, en la Argentina, un 64% de los inversores consultan el valor de sus inversiones una vez a la semana o más (un incremento del 9% respecto al 55% del 2019).
Si bien los inversores Argentinos han sufrido históricamente de una suerte de ansiedad financiera, la incertidumbre que se generó por la crisis del Covid-19, lógicamente, no hizo más que reforzar ese comportamiento. “Es relevante que, incluso frente a los desafíos actuales, el 39% desea incluir a la Argentina en su cartera de inversiones para el año próximo”, explica Pablo Albina, country head de Argentina y head of investment de Latinoamérica de Schroders.
“Lo importante es tomar decisiones informadas, y esto es algo que los argentinos parecieran tener muy presente”, agregó.
En el corto plazo, el estudio demuestra una división en el comportamiento de ahorro e inversión de la gente luego de levantadas las medidas de confinamiento en la Argentina. El 44% de los inversores destinó más dinero a ahorros en general, el 45% invirtió más en activos de bajo riesgo y el 31% en activos de alto riesgo
Más allá de los destacados sobre Argentina, para este estudio de Schroders fueron encuestados más de 23.000 inversores de 32 lugares del mundo.
A nivel global, el informe reveló que casi la mitad de los inversores (46%) ahorrarán más una vez que se hayan levantado las restricciones. Este sentimiento es más fuerte en aquellos que tienen entre 18 y 37 años.
Según Schroders, a pesar de los retos que ha traído la pandemia, la confianza de los inversores se ha disparado hasta su nivel más alto desde que se inició el estudio en 2016, con unas expectativas de rentabilidad media anual para los próximos cinco años del 11,3%, un aumento respecto al 10,9% previsto hace un año.
A nivel local la expectativa de retorno anual total promedio para los próximos cinco años es de 15%, superando el 14,6% del 2020 y el 11,3% global.
Fuente: cronista.com