Las claves de la reforma impositiva del Gobierno se centran en la simplificación del sistema tributario, la reducción de impuestos y el fomento a la inversión. Sin embargo, muchas de sus propuestas implican una baja de la coparticipación de impuestos a las provincias o tocan privilegios de sectores radicados en ellas, por eso al Gobierno no le alcanza el triunfo y necesitará a los gobernadores.
El gobierno de Javier Milei consiguió su anhelado triunfo en las elecciones legislativas con un resultado mucho mejor del que esperaba. El sorpresivo giro que logró dar en la provincia de Buenos Aires y las victorias en distritos como Córdoba y Santa Fe fueron clave para inclinar la balanza a su favor y, sobre todo, para robustecer a La Libertad Avanza (LLA) en el Congreso, donde seguirá necesitando acuerdos pero los buscará, ahora, fortalecido frente a varios gobernadores de peso.
El Gobierno podría contar a partir de diciembre con unos 100 diputados propios en la Cámara baja que le garantizan con creces el tercio del recinto, con el que puede bloquear los intentos de la oposición por rechazar vetos y DNU, incluso sin necesidad del apoyo del bloque PRO, que vio reducida sus filas a una decena de legisladores. Igualmente, para aprobar la reforma impositiva necesitará sostener esa alianza y buscar nuevas para tener mayoría, aunque las urnas lo dejaron mucho mejor parado para esa tarea.
Los ejes principales de la reforma impositiva que propone el Gobierno son los siguientes:
1. Simplificación del sistema impositivo
Reducción de la cantidad de impuestos nacionales para eliminar tributos de escasa relevancia y disminuir la carga administrativa y el costo de cumplimiento fiscal.
El Gobierno sabe que, de 120 impuestos, solo 10 explican el 90% de la recaudación, por lo que propone empezar a derogarlos, con la eliminación de 20 gravámenes en una primera etapa.
Se busca un esquema de simplificación de impuestos en general.
2. Impuesto a las Ganancias para Individuos
El ministro de Economía, Luis Caputo, adelantó que la reforma tributaria incluirá una baja de este impuesto para los trabajadores en relación de dependencia y jubilados.
El Gobierno presentó el proyecto de Ley de Inocencia Fiscal para el plan colchón, que impulsa el Régimen Simplificado de Ganancias. Si bien se encuentra vigente por decreto y ya cuenta con 13.400 adherentes, no da seguridad jurídica a los “dólares del colchón” y está trabado en el Congreso.
3. Autonomía fiscal provincial y Súper IVA
La propuesta incluye la devolución de facultades impositivas a las provincias en los impuestos recaudados por el Estado nacional, lo que podría generar competencia fiscal positiva y políticas locales más eficientes.
En este marco, se propone la creación de un IVA provincial. La Nación cobraría un IVA de 9% y el resto lo cobrarían las provincias, en un régimen de competencia fiscal, donde tratarán de atraer inversiones con el nivel de imposición.
El objetivo principal es que este nuevo esquema del IVA reemplace al impuesto provincial a los Ingresos Brutos y, de ser posible, a las tasas de Abasto municipales, que son altamente distorsivas, al ser acumulativos.
4. Revisión del gasto tributario
La revisión del gasto tributario se enmarca en el objetivo más amplio del gobierno de alcanzar el déficit fiscal cero y de llevar a cabo una reforma estructural. Los principales objetivos de esta revisión son:
- Aumentar la recaudación y los recursos corrientes del Estado.
- Simplificar el sistema impositivo y eliminar impuestos considerados distorsivos.
- Corregir las distorsiones que generan las exenciones y reducciones impositivas, muchas de las cuales han permanecido vigentes por décadas y son vistas como resultado de lobbies o con justificaciones económicas debatibles.
A pesar de la voluntad del equipo económico, la implementación de esta revisión ha encontrado resistencia en el ámbito legislativo.
En tal sentido, el Paquete Fiscal incluía un artículo que instaba al Poder Ejecutivo nacional a enviar un proyecto de ley al Congreso para suprimir o modificar exenciones y beneficios tributarios con el fin de incrementar los recursos corrientes en hasta un 2% del PBI, y fue eliminado en el Senado.
Se espera que la reforma impositiva contenga estímulos fiscales para atraer inversiones nacionales y extranjeras, creando un ambiente más favorable para los negocios y la actividad productiva.
Pero toda modificación impositiva debe ser aprobada por el Congreso, y simplificar el sistema tributario nacional, eliminar impuestos distorsivos a nivel provincial y generar competencia fiscal entre las provincias deberá contar con los gobernadores.




