El ministro de Desarrollo Social sostuvo que, independientemente de lo planteado en el Presupuesto 2021, “si hay un rebrote vamos a tomar medidas de emergencia”.
El Gobierno no descarta continuar con planes de asistencia para las empresas que fueron afectadas por la pandemia de coronavirus, y que están aún recuperando su nivel de actividad. Así lo deslizó el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, quien en C5N dijo que durante 2021 y en plena pandemia de coronavirus, se tomarán “las medidas sociales excepcionales que haya que tomar”.
“El presupuesto está pensado sin pandemia, si hay un rebrote vamos a incorporar medidas de excepción”, explicó el funcionario, en referencia a la ley de leyes votada en el Congreso en noviembre pasado que no incluyó partidas de asistencia como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y el Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP).
El Gobierno analiza con preocupación la llegada de la segunda ola de contagios de coronavirus y no descarta que se tomen nuevas medidas de restricción de actividades y de circulación. De hecho, la semana pasada la Nación alentó a las provincias a implementar toques de queda sanitarios durante la madrugada.
Las medidas de auxilio a los hogares y a las empresas demandaron al Estado en 2020 un gasto equivalente a casi 5 puntos del Producto Bruto Interno, lo que significa más de un billón de pesos, entre el IFE, ATP y el resto del paquete contra el coronavirus.
El IFE tuvo un alcance de 9 millones de personas durante tres pagos bimestrales de $10.000 que realizó el Gobierno entre abril y noviembre. El programa incluyó a sectores que quedaron desprotegidos por la irrupción de la pandemia y las restricciones a la circulación, como desocupados, trabajadores y trabajadores informales, personal de casas particulares, y monotributistas sociales o de las categorías A y B.
De acuerdo a datos oficiales, en total, prácticamente el 30% de la población argentina pidió a Anses cobrar los $10.000 de asistencia. Además de los 8,9 millones de casos aprobados, casi 4,6 millones de personas tuvieron sus solicitudes rechazadas, principalmente por tener un ingreso en blanco, ya sea el solicitante o un integrante de la familia.
El ATP llegó a cubrir, en el peor momento de la pandemia y con las restricciones de actividad y movimiento más rígidas en todo el país, los salarios de empleados de unas 234.000 compañías, principalmente comercio e industria. En esa primera ronda del Programa ATP, según estimaciones oficiales, la ayuda salarial incluyó a 2,3 millones de empleados en relación de dependencia.
“Tuvimos que tomar medidas de emergencia. Si hay un rebrote vamos a tomar medidas de emergencia independientemente de lo que está presupuestado hoy”, aclaró Arroyo.
Además, recordó que en el segundo trimestre de 2020 la pobreza ascendió al 47% y que en ese contexto, el Gobierno tomará ” las medidas sociales excepcionales que haya que tomar”.
Fuente: ambito.com