Los ahorristas están atentos a lo que pueda suceder en lo que resta de julio, por el salto en el dólar y el consecuente traslado a precios. Así, la renta que ofrecen los plazos fijos tradicionales comenzó a estar en la lupa respecto a la inflación, como también las especulaciones sobre la suba de tasas de interés que realizará el Banco Central y cómo impactará en los rendimientos.
Con una renta cercana al 4,4% mensual (53% TNA), hoy los plazos fijos están perdiendo frente a la inflación acumulada de todo junio, que fue cercana al 5,2%. Encima, los pronósticos de los economistas indican que en julio será aún más alta.
En el balance del primer semestre del año, las colocaciones tradicionales perdieron en el acumulado alrededor del 10% del poder de compra de sus fondos frente al alza de precios.
Es decir, hasta fines de junio, con el capital reunido hasta entonces “sólo se podía adquirir el 90% de una canasta similar de bienes y servicios” a la que se accedía al iniciarse el año con el dinero invertido, sostiene a iProfesional Andrés Méndez, director de AMF Economía.
Por lo tanto, y con la tendencia de inflación al alza, se espera en el mercado que el Banco Central suba las tasas de interés de los plazos fijos a fines de esta semana.
A pesar de perder contra la inflación, se puede decir que las colocaciones bancarias le ganaron en los primeros 6 meses del año al dólar, ya que permitieron comprar 4% más de dólares en el blue, a pesar de una suba en la cotización de 15% en junio, y un 2% más que el dólar solidario que se podía adquirir en enero pasado. Esto último se debe al límite máximo de compra de u$s200 mensuales.
Alerta plazo fijo por suba de precios en julio
A partir de fines de junio, el establecimiento oficial de ciertas restricciones al acceso al mercado cambiario oficial (MULC) por parte de los importadores, dio origen a una “tormenta perfecta” en el precio del dólar y, en consecuencia, generó un aumento de los precios internos.
En base a este contexto, se debe tener en cuenta que los dólares financieros aumentaron en la primera quincena de julio alrededor de 15%, por lo que se teme que haya habido un traslado de gran parte de este incremento al resto de los precios de la economía.
“En este aspecto, se advierte que las proyecciones de inflación para julio fueron crecientes desde marzo hasta el presente y, en particular, en esta primera quincena del mes pegaron un nuevo salto, hasta ubicarse en torno al 7% mensual”, detalla Méndez.
De hecho, en enero se preveía que en julio iba a registrarse una inflación de 4%, pero ahora los pronósticos subieron hasta casi el 7% para el corriente mes.
Plazo fijo frente a inflación y aumento de tasas
En cuanto a los pronósticos de suba de tasa de interés por parte del Banco Central, para darle mayor rendimiento a los plazos fijos y tratar de acercarse a la inflación, con el fin de intentar otorgar una renta positiva, como se ha comprometido el Gobierno con el FMI cuando se firmó el acuerdo este año, los pronósticos de los economistas son cautos.
Si se consideran los 31 días de julio, un depositante minorista puede obtener un rendimiento de 4,5% en todo el corriente mes.
“Este es un porcentual satisfactorio para las expectativas de inflación de hace 90 días atrás para julio, que era de 4,3%, pero que hoy ya es insuficiente para atender una suba de los precios que ya se estima en 6,9% en el mes”, resume Méndez.
Es decir, los plazos fijos hoy estarían ofreciendo casi 2,5 puntos porcentuales mensuales menos que el índice de precios al consumidor (IPC).
¿Cuánto pueden subir las tasas de interés?
Por los datos de inflación altos de junio, cercanos al 5,2%, y por la inercia alta de julio, se descuenta que a fines de esta semana el Banco Central estaría aumentando las tasas de interés que paga para los plazos fijos. Cabe recordar que a mediados del mes pasado la entidad ya aumentó la renta del previo 48% hasta el actual 53% anual.
“Ahora puede esperarse que el BCRA suba las tasas de interés y eleve los rendimientos en 500 puntos básicos (pb) llevando los mínimos desde una TNA de 53% a 58% anual. En este caso, el ahorrista recibirá en el mes cerca de 4,9%”, pronostica Méndez.
Y completa: “Más aún, si el Banco Central elevara las tasas en 1.000 bp (hasta 63%), tampoco lograría calmar el apetito de los depositantes, ya que se ajustaría a los pronósticos de inflación elaborados a lo largo de junio de 5,2% mensual, un conteo que ahora ha quedado demasiado atrás”.
En resumidas cuentas, el depositante de plazo fijo tradicional se enfrenta a una nueva pérdida de renta, ya que se extinguió el beneficio que acreditaba con los dólares financieros y, además, continuará profundizando el deterioro en el poder de compra de sus fondos frente a la canasta de bienes y servicios.“En julio perderá un 2% adicional, que lo encaminará a cerrar 2022 con un deterioro cercano al 20%”, concluye Méndez.
Fuente: iprofesional