FINANZAS – Alerta en los mercados: cuatro países están en riesgo de crisis cambiaria y advierten por Brasil y Chile

0
363

Un comprobado modelo de alerta temprana avisa que dos países europeos, uno euroasiático y otro de Asia del sur tienen un alto peligro de sufrir una hecatombe monetaria en los próximos doce meses.

Desde hace casi tres décadas el legendario grupo financiero japonés Nomura monitorea un grupo de más de 30 países emergentes, entre los cuales está Argentina, con el fin de anticipar crisis cambiarias. En la reciente actualización de su modelo Damocles, Nomura determinó que hay cuatro emergentes en riesgo de crisis cambiaria en los próximos doce meses: Turquía, la República Checa, Sri Lanka y Rumania.

 

Damocles es un cóctel de 8 variables claves que brinda alertas tempranas de crisis cambiarias en los mercados emergentes, donde siempre que el índice supera los 100 puntos para cualquier país, es una advertencia de que es vulnerable a una crisis cambiaria en los próximos 12 meses. En el último recálculo, Turquía, República Checa, Sri Lanka y Rumania obtuvieron puntuaciones superiores a 100. “Desde nuestras actualizaciones de 2022, cinco de ocho países que tenían puntuaciones Damocles superiores a 100 han tenido crisis cambiarias”, advierten los economistas de Nomura, Rob Subbaraman y Si Ying Toh.

En esta oportunidad la Turquía de Recep Tayyip Erdogan lidera con 140 seguida de República Checa con 126, Sri Lanka con 119 y Rumania con 101. Todos ellos están en la mira. Pero también están con puntajes cercanos a este umbral Chile y Hungría con 95 y el Brasil de Lula da Silva con 91.

Detrás, Egipto y Filipinas 84 y 81, luego con 75 Kenia y Colombia y con niveles de 65 y 64 Pakistán, Argentina y Vietnam. Ucrania, por ejemplo, tiene 59 puntos y otros de la región, como México y Perú 54 y 26 respectivamente.

“Aunque Turquía y Sri Lanka han experimentado recientemente crisis cambiarias, Damocles indica que todavía no están fuera de peligro”, alertan desde Nomura. En el caso argentino su nivel de riesgo de crisis monetaria fue evolucionando, según Damocles, desde un nivel de 41 en noviembre de 2021 al de 63 en noviembre de 2022 para hoy estar en 64.

En un año en el que los inversores han estado recurriendo al carry trade de los mercados emergentes (una estrategia de inversión que consiste en pedir dinero prestado en monedas de bajo interés para invertir en mercados emergentes de mayor rendimiento), es prudente preguntarse si los inversores están siendo compensados adecuadamente por la prima de riesgo percibida, aconsejan Subbaraman y Ying Toh.

Según Nomura, el triple shock de la pandemia, el conflicto en Europa y la alta inflación han ampliado la disparidad de los fundamentos económicos en los mercados emergentes. “Si bien algunos países han mantenido fundamentos sólidos, otros han visto un marcado deterioro de las finanzas fiscales, junto con crecientes déficits en cuenta corriente, una cobertura inadecuada de las reservas de divisas y tasas de interés ajustadas a la inflación profundamente negativas”, explican los analistas de Nomura.

En tal sentido, la experiencia histórica muestra que cuando el índice Damocles de un país emergente supera el nivel de 100 es una advertencia de que es vulnerable a una crisis cambiaria en los próximos 12 meses. Como prueba de la efectividad del modelo Nomura recuerda que “el modelo señaló correctamente el 64% de las últimas 61 crisis en la muestra inicial de 32 economías de mercados emergentes entre 1996 y 2021.

En la actualidad, la suma de las puntuaciones de Damocles para la muestra actual de más de 30 países de mercados emergentes ha disminuido de 2.190 a 1.799 entre noviembre del 2022 y agosto del 2023. Pero “esta puntuación sigue siendo alta según los estándares históricos, y advierte sobre las vulnerabilidades latentes en los mercados emergentes que se han acumulado en medio de la pandemia, el conflicto Rusia-Ucrania, el aumento de la inflación global y el posterior ciclo agresivo de aumentos de tasas globales y un dólar fuerte”, sostiene Nomura.

Pero una lección importante del gran número de crisis pasadas es que las primas de riesgo no siguen un proceso monótono, aumentando constantemente a medida que aumenta el riesgo; más bien, las percepciones de riesgo de los inversores parecen desarrollarse de forma binaria, intermitente o no.

“En otras palabras, la revaloración de las primas de riesgo de los mercados emergentes puede ser repentina y auto-cumplida, razón por la cual los modelos de alerta temprana como el de Damocles pueden ser útiles”, explican desde el grupo japonés.

Fuente: ambito